CAPITULO   TERCERO


Park Hye Jin, la observaba desde el otro lado de la mesa. No quiere mirarlo, ni se siente con fuerzas para hablarle. Él, respeta su silencio. La contempla abiertamente, sin esconderse, sin disimulo. Nadie parece percatarse de su juego de miradas. Alba ríe y charla con todos, con todos... menos con el.
Una hora. Dos. Tres...La vergüenza y el disimulo de los primeros momentos, han quedado olvidados. Buena parte de culpa, la tiene el contenido de las botellas vacías de soju que se amontonan encima de la mesa y que ya se han bebido. La música sigue sonando, el calor, la atmósfera y el licor, empiezan a pasar factura. Poco a poco el local se va vaciando. Alrededor de la mesa, sentados , están nuestros seis protagonistas. Alba y Raquel, apenas han bebido durante la noche. Maria, es otra historia. Está pletórica, alegre, divertida. Mas que de normal. No está borracha, pero Kim Garam Yo, está pendiente de ella. Ya no la deja beber, ríen juntos y parecen tener cierta complicidad. Están sentados uno al lado del otro, y de vez en cuando, Kim Garam se acerca a Maria y le dice cosas al oído. Ella ríe abiertamente y responde a su “juego” hablándole en susurros.
Goo Soo, sonríe contemplándolos, al instante se pone serio y contempla a Raquel. Pocos segundos después, sus ojos sonríen al mismo tiempo que sus labios. Su charla es amena, divertida. El trata por todos los medios de que Raquel se sienta a gusto a su lado, y ella quiere disfrutar del momento. Ya puede mirarlo abiertamente a los ojos, sin ponerse demasiado nerviosa. Pero se da cuenta que cuando el la mira, sin apartar la vista de sus ojos durante unos segundos, se siente perdida.
Park Hye Jin y Alba están sentados uno en frente del otro. No hablan entre ellos. Desde donde el está, puede contemplarla y la recorre con la mirada de vez en cuando, esbozando una media sonrisa encantadora. Se detiene en sus ojos. Alba que lo intuye, aunque no lo esté mirando en esos momentos, vuelve a sentir que le roban el alma. En la penumbra del local, ella distingue perfectamente la silueta de su cuerpo, su pelo, sus hermosos ojos , sus labios absolutamente perfectos. Todo en él es increíblemente sensual. Desprende un magnetismo que la atrae y seduce. Le gustaría besarlo allí mismo, bajo la tenue luz. Cierra los ojos...
- ¿Qué demonios estoy pensando?
Tarda unos segundos en abrirlos, y cuando lo hace, Park Hye Jin está sentado a su lado. Solo la mira. Ella después de la impresión del primer instante, se centra en observar a sus amigas. No quiere mirarlo y lo ignora.
Park Hye Jin, es un conocido integrante de un grupo musical. Su fama de “bicho raro” es casi equiparable a su talento artístico. Como líder de su banda, tiene siempre una gran responsabilidad que el sabe ejercer como nadie. Para sus compañeros es un referente a seguir, buen amigo, muy responsable, se preocupa por todos y mantiene al grupo unido. Dentro del mundillo artístico, es conocido no solo por su talento musical, sino por su carácter, inteligente, serio, perfeccionista y al mismo tiempo jovial. La cara y cruz de una misma moneda. Siempre ha sabido lo que quería y hasta donde estaba dispuesto a llegar para conseguirlo. Hay cosas que no tolera, una de ellas...que le mientan. Antes de llegar a donde ha llegado, ha tenido que trabajar muy duro y en sus primeros comienzos, no lo paso bien. Algo que ha marcado su carácter y que sus amigos saben. Goo Soo, Kim Garam Yo y él, son amigos desde la infancia. Han compartido muchos momentos inolvidables, experiencias...etc Y a pesar de que Goo Soo lleva cinco años, viviendo fuera de Corea, los tres han seguido manteniendo una estrecha amistad.
Alba, sabe perfectamente quien es él. De hecho, es una gran fan de su grupo. Aunque él nunca le ha llamado la atención como persona, siempre ha reconocido que es un hombre guapo, con talento, muy inteligente, y ahora lo tiene sentado justo a su lado.
- ¿Piensas ignorarme toda la noche?, le pregunta el de improviso. Lo tiene tan cerca, que puede sentir la calidez de su aliento.
Alba gira la cabeza y lo mira directamente a los ojos. Grave error. El la observa, penetrando en lo mas intimo de su ser. Parece saber que está pensando, incluso Alba piensa, que la posee con solo mirarla. Hasta tal punto, la intimida y fascina. No sabe que responderle. No sabe y tampoco puede. Su respuesta muere en el borde de sus labios, y no puede dejar de mirarlo a los ojos.
- ¿Tanto te intimido?, le pregunta sonriendo.
- No. Le dice, pero su voz no ha sonado ni siquiera real.
Park Hye Jin, sonríe aún mas. Deja de observarla y toma el último trago de soju que le queda en el vaso. Alba, se siente entonces liberada e intenta hablar con sus amigas.
- Deberíamos marcharnos chicas. Ya es tarde.
Su voz ha sonado en un tono tan bajo, que solo Park Hye la ha oído. Intenta levantarse, pero el la agarra del brazo, obligándola a sentarse de nuevo. No gira la cabeza para mirarlo.
- No te preocupes, le dice - tus amigas están bien. Goo Soo y Kim Garam, se encargarán de que lleguen bien al hotel. ¿Qué te parece si nosotros salimos y damos un paseo?.
Alba lo mira entonces, y comprueba que le sonríe abiertamente. El se levanta sin esperar respuesta y la invita a seguirlo.
La noche en Seúl es hermosa. El clima es agradable y miles de luces de colores, inundan la ciudad. Park Hye Jin y Alba, llevan unos minutos andando sin ninguna dirección determinada. Solo pasean. Ninguno de los dos a dicho nada desde que salieron del local. De improviso, comienza a llover, como si el cielo se hubiera abierto en canal. Mas que llover, diluvia. Park Hye toma a Alba de la mano y la arrastra corriendo hacia un callejón que tienen justo al lado, resguardándola de la lluvia intensa, bajo una cornisa. En un intento por hacer que no se moje, se pega a su cuerpo aprisionándolo entre la pared y el. De repente, Alba esta entre sus brazos, fuertes, acogedores. La lluvia los acorralaba y siente un escalofrío que le recorre el cuerpo entero.
- ¿Tienes frío?, le pregunta dulcemente, con su boca pegada a escasos centímetros de su cara.
- ....no, le dice en un susurro.
No pueden moverse. Ella, porque el cuerpo de el se lo impide, y él porque si se mueve, aunque sean solo unos centímetros, se va a empapar. Alba se siente protegida, el cuerpo de él es cálido, fuerte, seguro. No puede evitar sentirse bien en sus brazos y cierra los ojos.
Un grupo de hombres, pasan a su lado corriendo, intentando resguardarse de la lluvia, que sigue cayendo y los empujan . Park Hye, la sujeta con fuerza, atrayéndola hacia el. Cada centímetro de su cuerpo lo reconoce y... tiembla. El la mira a los ojos y así, despacio, casi sin proponérselo, su boca busca la suya y la besa con dulzura, solo unos segundos, sin presionarla, sin intentar entrar mas allá de sus labios, acariciándolos. - Soy una tonta, piensa, pero de sus labios solo sale una frase – Tengo que volver al hotel.
Dice la frase muy bajito, como con vergüenza, nerviosa. Ninguno de los dos se mueve del sitio. Permanecen unos segundos en la oscuridad del callejón, mientras la lluvia deja lentamente de caer y Alba aprovecha para zafarse de los brazos de el y caminar por la acera. Park Hye, la ve alejarse unos metros, en silencio, llamar a un taxi con los brazos, para que se detenga y entrar en el. En ese instante, reacciona y se acerca corriendo. Abre la puerta y entra al interior del vehículo, sentándose a su lado. Ninguno de los dos dice nada durante todo el trayecto hasta el hotel. Alba contempla el paisaje urbano de la ciudad y el, la contempla a ella. El tiempo pasa lentamente y la noche de Seúl los envuelve, junto con sus pensamientos.
A la mañana siguiente, Alba se despierta muy tarde. No ha podido conciliar el sueño, hasta bien entrada la noche y para cuando se ha dormido eran mas de las 5. Después de asearse y vestirse de manera informal, baja al comedor; sus amigas están terminando de desayunar. Antes de sentarse a su mesa, recoge una bandeja con algo de fruta y un café.
- ¡Buenos días!, saluda.
- ¡Buenos días, dormilona!, le dice Maria con una sonrisa en los labios. – y ahora...¡cuenta!
Raquel, no puede evitar una risita y contempla a Alba, entre curiosa y divertida.
- ¡Buenos días!, le dice - ¿Has dormido bien?.
- Si.
Pero su respuesta ha sonado a mentira y sus dos amigas no pueden evitar sonreír. Intenta concentrarse en el desayuno y come despacio un poco de fruta. Maria y Raquel la observan curiosas, pero es Maria la que finalmente se decide a preguntar.
- Bueno, ¿nos vas a contar como continuó la noche?, porque cuando nosotras llegamos, tú aún no habías vuelto. Y te recuerdo que saliste del local mucho antes que nosotras.
- No paso nada, si te refieres a eso. Paseamos durante una hora, mas o menos, empezó a llover y regresé al hotel. Me acompañó hasta la entrada y se fue en el mismo taxi, que nos trajo a ambos hasta aquí.
Maria eleva las cejas y explota en una carcajada, lo cual hace que todo el mundo a su alrededor, la mire entre curioso y sorprendido. Raquel, solo la mira.
- Vosotras...¿ llegasteis bien?. Tú parecías un poco mareada. Pregunta Alba mirando a su amiga, mientras continua comiendo.
- Lo pasé estupendamente, Kim Garan es encantador. Raquel y yo regresamos juntas. Goo Soo Y Kim Garam se empeñaron en acompañarnos hasta aquí. Por cierto, Hemos quedado con Goo Soo está tarde. Nos va a acompañar a ver el Palacio real, o Gyeongbokgung, como dicen los coreanos. Imagino que vienes con nosotras...¿no?.
- Claro que si. No me perdería esa visita por nada del mundo.
- Entonces decidido. Vamos a visitar algún museo por la mañana y por la tarde, después de comer, visitamos el palacio.
 
Alba continua desayunando, mientras tanto, sus amigas, charlan animadamente de la experiencia de la noche anterior. Alba las escucha en silencio mientras come. Se da cuenta de que sus amigas, están muy ilusionadas con sus nuevos amigos. Maria, no deja de hablar de “su chico”, como ella lo llama. Esta claro que se han caído muy bien mutuamente. Raquel, apenas habla, pero Alba, que ya conoce muy bien a su amiga, sabe que Goo Soo ha calado hondo en su corazón. ¿Cómo explicarles a sus amigas lo ocurrido la noche anterior?, cuando ni ella misma sabe como pasó. Como decirles que Park Hye, la beso simplemente con un roce de sus labios. Que ni siquiera fue un verdadero beso, pero que al sentir su contacto, su cuerpo entero tembló y su corazón latió con tal fuerza, que parecía que se le escapaba del pecho.
Termina de desayunar y salen del comedor. Al pasar por la recepción del hotel de camino al ascensor, La recepcionista de turno, la llama para que se acerque.
- Disculpe, le dice, - ¿ Es usted la señorita de la habitación 210, Alba León?.
Alba asiente con la cabeza. La recepcionista le señala una gran cesta de flores que se encuentra encima del mostrador.
- Esto ha llegado para Ud. hace unos minutos. Enseguida se las suben a su habitación.
Alba, se queda por unos segundos paralizada. Sin comprender. Maria, mira entre las flores y extrae un pequeño sobre, se lo pasa a Alba y esta, la mira incrédula, pero toma el sobre y extrae la tarjeta que se encuentra en su interior.
- Por un momento inolvidable. Lee para si. No lleva firma, pero tampoco la necesita.
- ¿Son de el?, pregunta Raquel, - ¿son suyas?
Alba, solo mira a sus amigas, que se encuentran mas nerviosas que ella.
- Si. Son suyas. Les dice.
Mientras suben en el ascensor, Alba escucha fantasear a sus amigas. Haciendo cábalas de lo que realmente pudo ocurrir la noche anterior entre ella y Park Hye. Al final, termina por contarles, que realmente no ocurrió nada, solo el simple roce de sus labios bajo la lluvia...
Son casi las doce del medio día, y el día en Seúl es realmente luminoso. No hace excesivo calor, el ambiente es agradable y no quedan sobre el asfalto, huellas de la intensa lluvia de la noche anterior. Nuestras tres amigas, llevan toda la mañana visitando pequeños museos y galerías de arte. Goo Soo ha llamado a Raquel hace media hora, para decirle, que se reunirá con ellas para comer juntos, antes de visitar el Palacio real. Han quedado en reunirse en un pequeño bar del centro. Nuestras tres amigas, llegan tarde a la cita. Les ha costado encontrar el bar. Cuando entran en el local, ven a Goo Soo sentado en una mesa. Se levanta nada mas verlas y se inclina saludándolas. Las tres toman asiento y comienzan a contar sus experiencias de esa mañana. Goo Soo las escucha en silencio y sonríe. Instantes después, se ponen en marcha de camino al restaurante, que no queda lejos. Al llegar, se sorprenden de la decoración del local. Muy moderna y minimalista. Nada mas entrar, una mujer joven, se dirige a Goo Soo, se inclina y lo saluda con cariño. El se vuelve hacia ellas y la presenta.
- Os presento a mi hermana, Sunah Choi Soo. Es la dueña de este restaurante, dice a modo de explicación – Ellas son, Maria, Alba y Raquel, le dice a su hermana. Las tres se inclinan imitando el saludo de Sunah.
Raquel, se siente repentinamente un poco nerviosa. No se esperaba esto. Su nerviosismo, no ha pasado desapercibido para Alba, que le sonríe, en un intento de tranquilizarla. Sunah, los acompaña hasta un reservado situado al fondo. El interior de esta pequeña estancia, presenta la misma decoración que el resto del local. Una mesa grande y negra, está situada en el centro de la habitación, dispuesta para cinco comensales.
Raquel, la observa. Sunah es una mujer joven, quizás tiene un año menos que su hermano. Muy hermosa, morena, de larga melena, que lleva recogida en una trenza, de ojos grandes y rasgados, piel muy blanca, va un poco maquillada, y vestida con sencillez, pero elegante. Transcurridos unos minutos, Sunah con una sonrisa, les ofrece la carta del restaurante, se inclina y abandona la habitación. Goo Soo toma asiento al lado de Raquel.
Alba abre la carta y comienza a leer. Para su sorpresa, comprueba que el menú esta en coreano, pero también en ingles. De pronto, la puerta se abre, pero Alba, que se encuentra de espaldas a ella, no sabe quien ha entrado, aunque imagina que es la persona que los va a atender durante la comida. Por lo que no presta mucha atención. La silla que se encuentra justo en frente de ella se mueve y una voz fuerte pero sensual le dice a modo de saludo...
- ¿Te gustaron mis flores?


FIN DEL TERCER CAPÍTULO

Leave a Reply

Tu YakOpinion es importante ^^ dejanos tu comentario >v<