
CAPITULO SEPTIMO Desperté sobresaltada como si alguien me hubiese llamado, encendí la luz mirando la hora en el despertador de la mesilla “las cuatro” era de noche todavía, estaba desvelada, no podía dormir, me levanté cogiendo el libro de texto aprovecharía para estudiar para el examen. Oí a mamá llamarme, me tuve que haber quedado dormida en el trascurso de la noche, me vestí y bajé